martes, 30 de junio de 2015

Ruta nocturna - Parque Juan Carlos I de Madrid


Ruta nocturna - Parque Juan Carlos I de Madrid

He hecho mi primera ruta nocturna. Realmente con las temperaturas que estamos teniendo lo más sensato es salir o bien a muy primera hora de la mañana o por la noche.
Ha sido una gran experiencia, suave temperatura, una muy ligera brisa (la única que sopló en todo el día) y la luz de las farolas.
Por supuesto, también habíamos puesto luces en la bici, para ver y ser vistos.


Enlace en wikiloc aqui

Un corto paseo y muy agradable.
No conocía el Parque, tiene unos preciosos lagos donde hay gente que aprovecha para pescar, además de estar muy bien acondicionado. No es de extrañar que aun siendo domingo, hubiera gente a media noche disfrutando del casi único momento en que se podía estar en la calle debido al sofocante calor.

He aquí nuestras plegables, porque naturalmente fui con mi chico, esta foto me encanta, cuánto disfruto haciendo estas cosas con él, un poco menos con las cuestas, pero el resultado es maravilloso…



Ahí le tenéis, el calor no achanta a una persona por cuyas venas corre sangre bilbaína y casi zaragozana…pero ese no es mi caso.
Para el, “salir a dar una vueltita”, es hacerse los 65 kms. del Anillo Verde que rodea Madrid, saliendo a las 5 de la tarde y volviendo deshidratado, pero satisfecho con uno mismo. 
A mi, será porque soy “poco riesgosa” como dicen en los culebrones, pero como deciros, no me seduce la idea, puedo vivir sin estar tan satisfecha conmigo misma.

Además sigo sin doble plato en la plegable…por lo que mi esfuerzo es mayor cuando se trata de superar algún desnivel…al final acabaré teniendo los cuádriceps más potentes que él, y será el quien me deba seguir con la lengua fuera, que se vaya preparando!!!



Hay que seguir preparándose de cara a las vacaciones, ya que durante la primera quincena de agosto queremos recorrer el Valle del Loira, desde Orleans a Nantes. Estoy entusiasmada con el viaje, así que toca ponerse en forma para disfrutar al máximo.

El Valle del Loira nos espera!!!


EVA

lunes, 4 de mayo de 2015

Vía Verde Ojos Negros (Eva)

Bueno….bueno…bueno!!! Lo hemos hecho!!! 222,55 kilómetros!!! Y la experiencia no ha podido ser mejor!!!

Hasta he disfrutado de los preparativos!!! El que fuera un viaje tan diferente a todos los anteriores lo hacía especial e interesante, no solo había que hacer un equipaje partiendo de un concepto distinto sino que todo debía tener tamaño bolsillo... Poco y pequeño. Pero se consiguió. Dani elaboró una lista detallando todo aquello que debíamos llevar para no dejarnos nada y la seguimos al pié de la letra.
Un añadido fueron estas camisetas que mi chico preparó para darme una sorpresa!

Y llegó la noche previa al viaje y apenas pude dormir porque atención…estaba nerviosa…Nunca había hecho nada similar, y llevo tan poco tiempo montando en bici que tenía dudas sobre si podría conseguirlo. No me preocupaban tanto los kilómetros que debíamos hacer al día sino la dificultad, las cuestas se me hacen aún “muy cuesta arriba”. He procurado prepararme haciendo spinning y saliendo a menudo con la bici pero desconocía cómo me iban a responder las fuerzas. Y desde luego no perdía de vista que a la salida de Teruel estaba el Puerto de Escandón, y la palabra PUERTO me hace hiperventilar.
Preparé lo imprescindible, aunque alguna cosilla se coló en mis alforjas, como una camiseta algo más mona para poder salir con ella cuando llegáramos al final de la ruta y…un minúsculo secador de pelo de viaje que tenía guardado y que aún no sé cómo llegó a colarse entre mis cosas…y por supuesto un lápiz de ojos y una cremita. Una cosa es una cosa y otra es otra.

Y allá que nos fuimos a la estación de autobuses de Méndez Álvaro con nuestras alforjas y nuestras bicis en sus correspondientes bolsas. Lo cierto es que no son tan pesadas y una vez colocadas al hombro se llevan estupendamente.


Bajamos a la dársena desde la que salía nuestro autobús, viajamos con la línea Samar, las colocamos en el compartimento de equipajes junto con las alforjas sin ningún problema y directos a Monreal del Campo.
Cuando llegamos montamos las bicis y ya llegamos al hotel pedaleando, esta fue la primera toma de contacto.
A la llegada plegamos las bicis y a la habitación. Cenamos algo y nos fuimos inmediatamente a dormir para estar descansados y comenzar la ruta por fin.
Jueves por la mañana, suena el despertador, un sol radiante aunque la mañana estaba fría, ropa apropiada, desayuno, montar bicis y colocar alforjas, y… preparados, listos…YA!!

Daba comienzo la ruta de Ojos Negros a Puerto 
de Sagunto.



Primera etapa: Monreal del Campo – Teruel.
El primer tramo de ésta etapa lo hicimos por la Nacional hasta Alba del Campo, no me hacía mucha gracia la idea de ir por carretera pero al discurrir junto a la autovía apenas nos cruzamos con ningún noche y desde Alba del Campo a Santa Eulalia fuimos por carreteras comarcales disfrutando de mucha tranquilidad y de bonitos paisajes.
En este tramo nos cruzamos con dos ciclistas que al vernos consultar unos datos nos preguntaron si necesitábamos algo, charlamos un rato con ellos y nos recomendaron visitar en Teruel por la noche la zona del Seminario porque tenía mucho encanto iluminada.
En Santa Eulalia ya pudimos enganchar con la vía verde y desde allí todo fue seguir el camino marcado.
El pasar por las antiguas estaciones de tren abandonadas tiene mucho encanto, en una de ellas paramos a tomar un tentempié y reponer algo de fuerzas para poder continuar sin problemas, y charlamos con otra pareja que había parado también a descansar.
Está claro que cuando no estás habituado a hacer este tipo de rutas sino vas acompañado de alguien experimentado puedes tener problemas, pero viajando con Dani es imposible tenerlos porque estuvo pendiente en todo momento de hacer paradas para reponer líquidos e ir comiendo alguna cosilla y no desfallecer.
Qué decir de la dificultad de esta primera etapa, pues que no reviste ninguna. El único problema lo tuve a la entrada de Teruel…vaya cuestecitas. Llegue al cartel de la foto casi sin aliento, como eché de menos tener un segundo plato! Cuestión que pienso resolver en breve.

Ya dentro de Teruel compramos algo ligero para comer porque no encontramos ningún sitio donde, debido a la hora, tuvieran aún la cocina abierta y buscamos el Hotel. Alli aprovechamos para darnos una ducha reponedora, comer y descansar para poder salir al atardecer y visitar Teruel la nuit.
Una ciudad preciosa en plena Semana Santa. Vaya tapas nos pusieron en el bar Barricas!! Habrá que volver.















Segunda etapa: Teruel – Jérica
Viernes por la mañana, despertador, sol radiante, ropa apropiada, desayuno y preparar bicis y colocar alforjas.
Y yo que me preguntaba la utilidad de llevar cinta americana. Pues aquí lo comprobé, le falló la pata de cabra a mi bici y el enganche de la luz se partió al caer. Así que unas vueltas de cinta y listo.
Y salida de Teruel para enlazar de nuevo con la vía verde que se coge junto a Dinópolis.

Primera cuesta y sorpresa!! descubrí el miedo que le tengo a las bajadas pronunciadas. Subí una cuesta de las que denomino “cuesta importante”, y cuando estaba arriba y vi lo que debía bajar me empezó a faltar hasta el aire. Bajada con tierra y piedras y con una curva, creía que iba a derrapar y que caería ladera abajo, así que me tuve que bajar para hacerla caminando, aunque el último tramo me pude subir y terminarlo en bici. Qué fastidio, las subidas porque me cuestan y las bajadas porque me dan miedo…Disfruto mucho de la bici pero estoy deseando coger seguridad para disfrutar de verdad. A continuación daba comienzo el Puerto de Escandón y después de este primer contratiempo ya pensaba que no iba a poderlo subir. Pero para mi sorpresa no fue ni de lejos lo que había imaginado, ni siquiera tuve que bajar a primera, son 12-15 kms de subida pero no pronunciada, si yo pude subirla en segunda es porque no reviste ninguna complicación. Solo hay una pendiente pronunciada como veis en la foto, el firme está lleno de piedras lo que hacía que me patinaran las ruedas lo que sumado a la inclinación me obligó a bajarme y tuve que subir andando.
Hasta aquí fuimos acompañados por dos ciclistas con los que fuimos charlando y que nos recomendaron parar en Puebla de Valverde a comer.

El resto de la subida sin problemas, así que satisfecha por el resultado continuamos el camino.

Paramos en Puebla de Valverde a comer unos bocadillos y rellenar bidones,
Y continuamos
Nos encontramos puentes
Y algunas zonas donde había habido derrumbes.
También hemos cruzado vías de tren…
Diversión garantizada!!

Como en Barracas no pudimos parar a pasar noche por estar todo completo nos vimos obligados a continuar hasta Jerica, una vez encajada la noticia que fue asumida por ambos sin mayor problema, hicimos una parada para tomar la mitad del bocadillo que habíamos guardado pensando en tomar un tentempié a media tarde y seguimos rodando.
Al final de la etapa habíamos recorrido unos 95 kms. Quién me iba a decir a mi hace unos meses que iba a ser capaz de recorrer en bici esa distancia!
El paisaje de este último tramo es precioso y está plagado de túneles. Gran parte del recorrido transcurre junto a las vías del tren. Pero llevábamos algo de prisa para evitar que nos anocheciese antes de llegar a Jérica y debíamos aligerar.
Por fin llegamos al hotel, con el último rayito de sol y cansados. Después de darnos una ducha caliente, cenamos y acto seguido nos fuimos descansar para no acusar demasiado el cansancio al día siguiente. De todos modos estábamos tranquilos porque era la última etapa y la más sencilla, o eso creíamos.


Tercera etapa: Jérica – Puerto de Sagunto.
Sábado por la mañana, despertador, sol radiante, ropa apropiada, desayuno y preparar bicis y colocar alforjas.
Cogimos enseguida la vía verde y a pedalear, pero SORPRESA!! Los caminos ya no tenían nada que ver con lo anterior, había mucha piedra y las ruedas de las plegables patinaban continuamente, las plegables en este tipo de firme no se desenvolvían muy bien y resultaba difícil hacerse con ellas. Así que ya el pedaleo no era tan ágil y costaba ir avanzando más de lo previsto.
Parecía que este último tramo iba a ser todo en bajada pero tampoco fue exactamente así, y con diferencia terminó siendo la etapa más dura. No veía el momento de llegar a Puerto de Sagunto, pasé un par de ratos complicados con tanta piedra y tanto bote sobre la bicicleta sin poder rodar cómodamente. Aunque no por ello las vistas dejaban de ser impresionantes.
   
Llegamos al último tramo, una vía ancha con menos piedras y baches cuyo camino iba acompañado del cauce del Rio Palancia. Solo había que hacer un último esfuerzo.
Durante unos kilómetros fuimos pasando entre campos de naranjos y fue el único tramo que se pudo rodar sin sufrir.
Y llegamos a Puerto de Sagunto, solo una calle, ya asfaltada, con música de móvil de fondo y por fin vimos el mar. Qué momentazo el de parar la bici y decir, lo hicimos, hemos llegado!!!
 











Y al día siguiente vuelta a casa en tren agotados pero contentos


Si me preguntaran que ha sido lo mejor de todo el viaje no sabría ni por dónde empezar por las muchas razones que se me ocurren, podría decir que por el viaje en sí, porque no es solo el destino, es todo el recorrido, por supuesto también por la posibilidad que brinda este tipo de viajes de disfrutar del entorno y del contacto con la naturaleza, pero sin lugar a dudas, lo mejor, la compañía y lo mucho que nos hemos divertido.

He de reconocer que antes de comenzar el viaje me preocupaba ser un lastre porque mi chico tiene mucha experiencia, lleva años montando en bici, y yo acabo de empezar. Para mí es inevitable pensar que debido a mí no está disfrutando tanto como le gustaría pero no ha dejado de insistirme en que esto es cicloturismo y que se trata de disfrutar del recorrido sin prisa. En todo momento se ha adaptado a mi velocidad y ha tenido en cuenta mis carencias y valorado mi esfuerzo, ha tenido una muy inteligente manera de enfocar todo esto, ha hecho que me enganche porque en ningún momento me ha impuesto nada ni me ha metido en nada de lo que yo no pudiera salir, tanto así que hasta me he animado a comprar una Commençal. Estoy como una niña con zapatos nuevos. Es un concepto totalmente diferente y mucho más apropiado para lo que he descubierto que me gusta realmente, que es perderme por caminos. Y tiene tres platos!!!

Ahora toca hacerse con ella, seguir entrenando y cogiendo seguridad y quien sabe…este verano Vía de la Plata!!!! Ya hemos empezado a mirar algo y estaría genial empezar en Mérida y terminar en Benavente. Hay un par de etapas complicadas pero me prepararé a conciencia.
Mientras llega el momento procuraré salir a hacer rutas siempre que el tiempo lo permita y hacer mucho spinning

Eva

viernes, 10 de abril de 2015

En plegable por la vía verde de ojos negros (Dani)

Aunque sé que estais esperando la cronica de Eva, os adelanto la mía para ir abriendo boca

Después de 3 meses de preparación desde que decidimos que en Semana Santa íbamos a hacer la vía verde de Ojos Negros, de spinning en casa, de hacer rutas pequeñas, de probar el material en una salida de dos días, llegó el momento de hacer con mi chica la ruta.
Tres días de ruta, 220 km, bicicletas plegables, motivación, y sobre todo mucha ilusión.
Todo esto se fue convirtiendo en sonrisas, risas, carcajadas, y sobre todo felicidad de estar haciendo algo que te gusta y con la persona que quieres para compartirlo

El miércoles salimos hacia Monreal del Campo, con las plegables en bolsas, y las alfojas llenas.

Para llegar a Monreal del campo, elegimos la opcion autobus desde Madrid con la empresa Samar (18 euros pp). Las bicicletas y las alforjas en el autobus sin ningun problema.
Cuando llegamos, teniamos el Hotel a las afueras, a unos 2 km de donde nos habia dejado el autobus, por lo que montamos las bicis y nos fuimos para allí montados.
Nos estaban esperando para la cena y enseguida nos fuimos a dormir emocionados.
Al dia siguiente empezamos la ruta.

Las etapas fueron:

Monreal del Campo-Teruel
La primera parte fue por carretera comarcal y la nacional hasta enlazar con la vía verde en Santa Eulalia. Se

puede hacer perfectamente así, ya que prácticamente no encontramos ni un solo coche y además vimos una presa romana y visitamos Alba.En Santa Eulalia cogimos la via verde, y tranquilamente fuimos avanzando hasta Teruel.
Ya en Teruel, dejamos las cosas, subimos las bicis y despues de la ducha y de comer unas empanadas nos fuimos a ver las procesiones y a dar un paseo por la plaza del Torico.
Aqui os recomiendo el bar Barricas, impresionantes tapas.





















Teruel-Jerica
Nuestra idea era dormir en Barracas pero no había sitio, tuvimos que bajar 30 km mas abajo (esta parte es toda cuesta abajo) para alojarnos allí.

El puerto que se sube justo pasado Teruel es muy suave y muy asequible, sin ninguna rampa de mas del 4%. 
Lo unico una subida para enlazar con la via verde, pero de 50 metros para coger el puente de la foto

La verdad es que Eva era la mayor preocupación que tenia desde antes de empezar y se sube sin ningun problema. Por el camino estuvimos charlando con dos ciclistas de Teruel que habian salido a dar una vuelta y nos recomendaron que parasemos a comer en la Puebla de valverde. Unos bocatas estupendos y una cocacola, en un ambiente te ciclistas que estabamos haciendo la via verde.

Muchas familias con niños y algunos hasta tres generaciones rodando juntos.
Nos cominos medio bocata cada uno con la cocacola, rellenamos los bidones y volvimos a salir.
Una vez llegados a Barracas paramos a descansar un rato y a comer el otro trozo de bocadillo para afrontar los ultimos 30 km hasta Jerica.
 


Jerica-Puerto de Sagunto
Nos levantamos un poco mas tarde ya que la etapa que se suponía mas corta y facil pero que se nos complicó por el estado de la vía Verde. 

El ir con plegables esta parte nos penalizó mucho. En una bici con suspensión delantera hubiera sido un paseo. 
Una vez acabada la vía verde como tal, nos encontramos con muchos sube-baja cortos que no se visualizan en los perfiles (3 o 4 metros de subida no más, que nos ralentizaban mucho) y que al ir con el suelo tan roto, piedras y demas nos obligaba a ir bajandonos. 

Juntando eso al acumulado de los dos dias anteriores nos daba la sensacion de que los kilometros no pasabán.

La parte final ya fue mas facil y bonita, desde Sagunto a Puerto Sagunto fuimos por un lateral del Rio Palancia que está acondicionado para bicis y que nos llevó hasta el mar, fin de nuestro viaje.

Hicimos noche alli y luego nos acercaron en coche a Valencia para la vuelta, esta vez fue en Ave.
Para los que no les puedan llevar en coche, hay dos opciones, la via Xurra o el cercanias desde Sagunto.

Como resumen, un viaje iniciatico divertido, sencillo y muy especial.
Lo mejor, que a la vuelta ya estaba Eva pensando en donde podemos ir la siguiente escapada.

Os dejo el track